domingo, 24 de diciembre de 2017

HOMILÍA SANTA MISA DE NOCHEBUENA / 24 DICIEMBRE 2017.

 “OMNE VERUM  A QUOCUMQUE DICATUR, A SPIRITU SANCTO EST”.



A horas de entrar en el Portal de Belén, quiero recordar un pequeño chiste que contó un amigo a miembros de la curia hace un tiempo durante una visita que hizo a la Santa Sede. Dos hijos de Israel, de nombre Efraín y Asael después de una vida de gran esfuerzo, luego de terminada la Segunda Guerra Mundial lograron viajar a conocer Europa, y entre los lugares visitados estaba El Vaticano. A la entrada del templo, Asael que era agricultor le dice, con ojos vidriosos y lleno de emoción  a Efraím: mira aquí está la papa…por fin hemos descubierto…aquí está la papa!  Efraín que era un gran profesor de universidad le dice en tono académico: “Efraín no se dice la papa, sino el Papa”. A lo cual su amigo insiste: ¡Aquí está la papa! Entre toda la muchedumbre, de gente que iba y venía, su amigo le dijo: “¿Por qué dices que está aquí si yo no lo veo?”...A lo que Efraín  responde: “Mira si estos comenzaron con un establo y después de dos mil años están aquí, aquí está la papa”.

Y debemos decir que así es: “aquí está la papa”, lo que para nosotros es una verdad evidente, una verdad incuestionable que se tiene como un don de Dios que es preciso implorar con insistencia.

Por ello, un creyente lejos de dejarse avasallar por la falta de amor a la verdad  en la vida actual, asume con valentía y convicción la misión encomendada por el Señor al momento de subir a los Cielos en el día de la Ascención: “Id al mundo entero…enseñando todo lo que yo les he enseñado” (San Marcos XVI, 15).

Los primeros misioneros que fueron los apóstoles recorrieron diversos lugares. No tuvieron la oportunidad de acudir a acabadas academias ni recibir grados  ni posgrados ni doctorados. A diferencia del primer mundo actual, sólo hablaban –quizás- una lengua, y no tuvieron clases de gramática para hilvanar sus escritos ni de lógica para argumentar ordenadamente, ni de estadística para programaciones y evaluaciones, ni de cálculo para poder llegar a fin de mes…Peso a todo, contra toda previsión humana se cumplió la promesa hecha por el Arcángel Gabriel a la Virgen el día de la Anunciación: “Para Dios nada es imposible”, por lo que todo es posible para aquel que se confía en Dios y sigue a Cristo: “El Camino, la verdad y la Vida” (San Juan XIV, 4).

Y recorrieron “mundos desconocidos” y culturas en las cuales el poder, el conocimiento, y el progreso eran profusamente idolatrados, con lo cual,  por medio de su testimonio de vida de creyentes convencidos fueron capaces de ser convincentes y doblegar la fuerza de un imperio entero donde el sol no parecía ponerse; a la vez que supieron hacer resonar su voz insertos en culturas donde la sabiduría hinchaba insospechadamente el alma de orgullo,  la soberbia del progresismo de alzar una sociedad sin Dios se rendía ante la evidencia de una vida donde se repetía en palabras y acciones la invitación hecha: “te basta mi gracia” (2 Corintios XII, 9).

Y fueron por todos los rumbos, encontrando respuestas generosas, suspicacias y dudas, desconfianzas y persecuciones, animosidad e incomprensión, lo cual no amaino su espíritu de ir tras la oveja perdida, tras aquellos que permanecían sumergidos por décadas en fantasías que prometían un nuevo mundo,  lo cual,  inevitablemente,   entrañaba un alma envejecida donde los recuerdos de épocas mejores superaba a los sueños de construir un mundo para Jesucristo.

Nada detuvo ese ímpetu. La fe se mostró en sus obras hasta el punto que los vecinos decían: “Miren cómo se tratan” (Hechos de los Apóstoles II, 47). Una fe virtuosamente contagiada y contagiosa que se expandió por el mundo entero entregando una nueva manera de vivir.

En caridad: Con perdón, generosidad e iniciativa, una lógica que desde el Sermón de las Bienaventuranzas suena a unos que es “locura” y a otros que es  “simple necedad (1 Corintios I, 18).

El mundo no puede comprender desde su “lógica” cómo Dios actúa porque no mira desde la fe, entonces esta cultura está llena de resentimientos, de venganzas, de individualismos que descartan de su entorno vital a los más necesitados, no sólo en el plano material sino en plano espiritual, moral y virtuoso. ¿Cómo encontrarán a Dios si nadie les habla? ¿Cómo dignificar a aquel que se subvalora ante el abajismo cultural que impera a su alrededor?

Recientemente el mundo ha dado primeras portadas a la desnutrición de un oso polar que infructuosamente buscaba alimento, pero ese mismo mundo progresista que rasga vestiduras por tales dramas de la fauna animal permanece indemne frente a las tragedias de la vida espiritual, relativizando lo que de suyo es eterno y esencial.

Impone con ello una verdadera dictadura que no ve más allá de sus narices, y no va más allá de lo que sus pasos le permiten dar, olvidando que “el hombre fue creado para: buscar a Dios, para encontrar a Dios y para vivir en  Dios” (San Alberto Hurtado).

La caridad brilla en esta Noche Buena porque Dios, que es amor ha nacido en medio nuestro, dando cumplimiento definitivo a las promesas hechas desde la antigüedad. ¡De una vez para siempre habló por medio de Él al mundo! Y esa voz es la que debemos descifrar para que el mundo entero pueda  reconocer a su Dios presente desde hace más de dos mil años.

Sin duda, la vivencia de la caridad hace presente el aroma del Cielo, y predispone buenamente a los creyentes a una mayor perfección y a quienes están llamados a creer les abre la oportunidad de un cuestionamiento en torno a sus humanas seguridades, poderes y placeres. Surge la interrogante desde la Buena Noticia que nos ha nacido: “¿De qué le sirve al mundo ganar el mundo entero si pierde su alma?” (San Mateo XVI, 26).

La indigencia y fragilidad de un recién nacido hoy es capaz de cuestionar los poderes del mundo, y de cautivar la sabiduría de pastores y reyes, cercanos y lejanos, de nuestro hogar y fuera de él. El universo, expectante de su venida, ahora canta de gozo ante su presencia pues “una gran alegría nos ha nacido”.

La caridad verdadera es contagiosa, visible, procura actuar no para ser reconocida sino para hacer partícipe de la bendición de Dios que,  como brisa que sobreviene, lo impregna todo suavemente, no irrumpiendo con la estridencia  del orgullo ni con la sagacidad de aquel que oculta segundas intenciones en velada mentira. Es que al demonio siempre le gusta o el ambiente del ruido y o el del ocultismo, que es enemigo de puertas abiertas.

¡Abramos las puertas del corazón al Redentor del Mundo! Exhortaba en su Misa inaugural el recordado Papa Juan Pablo II. ¡No teman, abran las puertas!

En verdad: Con certezas, con doctrina segura y común enseñada por los apóstoles y sus legítimos sucesores, y firmeza en la humilde exposición, de toda verdad cuya fuerza, finalmente radica en que… es verdad.

El mundo de hoy se coloca nervioso ante el tema de la verdad. En muchos aspectos podemos decir que estamos frente al intento de la eliminación de la verdad por medio de la predicación del relativismo. Resulta curioso que la única verdad inmutable para algunos es que la verdad no existe.

Uno de los signos evidentes de una desacralización, nacida “puertas adentro” y fomentada “puertas afuera”, es la denominada “cultura del feísmo”, en la cual,  se mezclan lo grotesco, lo violento, y lo impuro. Lejos de cualquier mayor análisis, podemos afirmar que debemos estar entre las naciones donde el leguaje está cruzado por el uso frecuente del garabato; a pesar de lo mucho que se ha tratado del bulling y de la frecuente condena a los abusos de menores, este año aumentó en Chile el 20% el número de niños maltratados por sus pares;  el fomento de un ambiente sexista y libertino cuya condena suele ser motejada por la prensa liberal de “cartucha”, ha ocasionado el mayor fracaso de una política pública de salud al prescindir del compromiso fiel y exclusivo, del espíritu de sacrificio, del fortalecimiento de la voluntad, de la virtud de la castidad y pureza, todo lo cual,  marca el camino para frenar una pandemia que ha crecido un 34% este año siendo el país con mayor aumento en toda América, y cuyas consecuencias, por ejemplo,  económicas,  son realmente desastrosas. ¡Qué decir a nivel espiritual, social y moral!

El abajismo impuesto por la ideología progresista disemina el feísmo y mutila de verdadera creatividad cegando los ojos del cuerpo y del alma hacia aquella capacidad de descubrir “la belleza que es el esplendor de la verdad” (Santo Tomás de Aquino). Un alma ensimismada no es capaz de abrirse hacia lo que trae la paz, el bien, la verdad, la belleza y por cierto,  será monotemática, será un arte de blancos y negros.

En esperanza: Con la confianza que Dios no camina para atrás en sus decisiones, esperamos a Aquel que siempre cumple…lo que dice lo hace. ¡Qué diferente suele ser nuestro obrar!

Si algo caracteriza la esencia de una vida “al modo católico” es que vive en esperanza porque sabe que las promesas de Dios se cumplen, porque sabe que el bien es difusivo y por tanto, el Reino de Cristo ya iniciado no puede sino llegar a su plenitud en el tiempo establecido por el mismo Dios, por lo que realmente vivimos expectantes por los tiempos no sólo mejores sino plenos que vendrán.


Es una esperanza que va más allá de los buenos propósitos, de las buenas intenciones y de los simples entusiasmos. ¿La razón? Porque Cristo es la esperanza, que: “vino” (Belén),  “viene” (Eucaristía),  y “vendrá” (Parusía).

Hermanos: Los tiempos que vivimos son desafiantes para la fe. Y un católico nunca se deja avasallar por la oscuridad de una noche puesto que,   sabe que sobreviene pronto una alborada, un nuevo amanecer, para lo cual debe estar preparado en todo momento.
La esperanza invita a vivir la fe,  con convicción, en certeza, invitando a quienes están a nuestro alrededor por medio de un apostolado proactivo, que busque con afán la conversión de un mundo “cara a Dios”, subiendo que, en ocasiones,  “quien dice verdades pierde amistades” (Santo Tomás de Aquino), lo cual incluye el precio de la ingratitud, del menosprecio, de la exclusión, y en más de una oportunidad, el camino del martirio ofrecido y asumido.

A los pies de Jesús, recién nacido, una vez más estamos contemplando sobrecogidos el día que el Cielo bajó a la tierra y la tierra subió al Cielo…asumiendo que la verdad del amor es el amor a aquella verdad que nos colma de una sólida esperanza, aun cuando en esta Noche Santa un miembro de nuestra familia, o una amistad cercana ya mire el rostro de Cristo desde lo alto del Cielo; o alguno lo haga desde su lecho de enfermo acompañado por el silencio de tanto sufrimiento e incertidumbre; o se encuentre recluido a causa del exceso de una violencia, un vicio o un mal hábito adquirido  que la ley exige reparar; o quizás, de quien como el hijo pródigo se fue a un lugar lejano, y aun tarda en regresar al hogar.

La señal que Dios nos da esta Noche, es la misma que descubrieron los humildes pastores de Belén y los sabios provenientes del Oriente: “Verán un Niño envuelto en pañales” (San Lucas II, 11). Ellos vieron y creyeron, este es el mismo itinerario que nos  invita a seguir el Señor en este día, con la certeza que no somos mendigos de esperanzas, no somos mendigos de verdades, no somos mendigos de amores, porque hoy nos ha sido dado por medio de una Virgen Madre.  “El Mesías, el Señor”. ¡Que Viva Cristo Rey!


jueves, 9 de noviembre de 2017

“SANTA VIRGEN DE LAS VÍRGENES”.

 MEDITACIÓN SEGUNDA / MES DE MARIA / AÑO 2017

 19:30 MES DE MARÍA PUERTO CLARO

El corazón de la Virgen María fue moldeado por la persona divina del Padre del Hijo y del Espíritu Santo. Fue revestido de aquellas virtudes que requería la misión que le seria encomendada: ser la Madre de Jesucristo.

“Purísima debía ser la que llevaría en sus entrañas al Salvador del Mundo”, teniendo un “estilo” de vida único, incomparable a cualquier otro por virtuoso que fuese. En realidad, ante la Virgen nada es comparable por eso esta segunda letanía o alabanza hacia su persona y virtudes reconoce la vinculación entre ser santo y el camino de la virginidad: Ello no sólo es compatible, sino que se exige mutuamente.

Nuestra Madre del Cielo vivió consagrada desde su más tierna infancia, por ello ningún segundo de su vida estuvo al margen de la vivencia de esta virtud.  Esto aparece elocuentemente citado en los evangelios en el encuentro de la Virgen con el Arcángel Gabriel el día de la Anunciación, el cual,  ante el recuerdo que hace la Virgen María  en orden a estar consagrada por el voto de virginidad, recibe como respuesta del Cielo: “El niño que tendrás será obra del Espíritu Santo”, con lo cual antes, durante y después del parto Ella conservaría su estado virginal,  querido y aceptado por Dios mismo.

Sin duda,  María siempre vivió virginalmente. La Santa Biblia señala como signo de la venida de Cristo al mundo que “nacería de una virgen” (Isaías VII, 14). De la única mujer que la Santa Biblia aplica con propiedad el apelativo de “Virgen” es de  María Santísima:

San Lucas I, 27: “A una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María”.
San Mateo I, 23: “He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Enmanuel, que traducido es: Dios con nosotros”.

Desde el inicio de la vida de la Iglesia los creyentes nos hemos dirigido a Ella como “la Virgen”, reconociendo el carácter exclusivo de su total consagración. 

En los Santos Evangelios  se habla de los parientes cercanos a Jesús como sus “hermanos”, lo cual se debe a que en Israel los primos y los primos hermanos eran denominados como “hermanos” sin serlo más que por la extensión de la pertenencia de parentesco.
 07:20. Misa Colegio Mackay 2017


En la actualidad muchos amigos se tratan mutuamente de “hermanos”, al interior de una comunidad religiosa nos solemos tratar de “hermanos”, sin que por ello haya una vinculación genética. Por esto, sólo de Jesús se habla del hijo de María, lo que evidencia el carácter de la virginidad perpetua.

¿Qué lecciones podemos sacar en este Mes bendito de esta alabanza “Santa, Virgen de la vírgenes”? 

a). Primero, que Ella está a la cabeza de todas las vírgenes: En el plano de la naturaleza las cosas más valiosas son las más puras. Un brillante mientras más puro más valioso; el oro mientras más puro más cuesta, el agua mientras más pura más tonifica;  el aire mientras más puro más oxigena…en fin la lista es amplia, y nos ayuda a valorar mejor cómo el don de la virginidad hace bien a la comunidad, pues valoriza a la persona y fortalece los vínculos de la amistad, de la convivencia en el colegio, y de toda vida social en general.

En cambio, la ausencia de la virginidad trae consecuencias comparables a las que acontece en el plano de la naturaleza: el agua estancada es infecunda; la contaminación del aire no nos  deja ver bien ni respirar. Por ello,  dice Jesús: “Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios”.

b). Segundo, que es la Reina de todas las vírgenes consagradas: Al inicio de tantas vocaciones de servicio a los demás, como de consagración perpetua y exclusiva en el sacerdocio, está la vivencia de una virginidad que vence el egoísmo con la capacidad de servir

Por eso, la Virgen María es la primera en la fila al momento de ayudar a quien lo necesita, y su carácter real emerge de su especial consagración en la camino de la virginidad. Debemos valorar el servicio que prestan tantas almas consagradas, en la vida “religiosa” y en la vida “laical”, inmersos en el mundo de la educación religiosa, de la atención a los enfermos, de la evangelización y misiones en tantos lugares, en la mantención de obras de caridad, todo lo cual tiene un engaste precioso en el don de la virginidad.

c). Es el mejor ejemplo para seguir la virginidad:  Toda la vida de María Santísima es ocasión de admiración pero también de imitación, porque  Ella ha sido puesta como un puente que une a Dios con el hombre llamado a la perfección, donde la virginidad es un signo que anticipa la vida que tendremos en el cielo.

MES DE MARÍA MACKAY SCHOOL 2017

A lo largo de la vida se puede ofrecer espiritualmente a Dios esta consagración virginal, como niños, adolescentes y jóvenes reservándose para la recepción del santo matrimonio o una especial consagración religiosa y sacerdotal.

El ejemplo de la Virgen que desde niña se consagra a Dios es una invitación a seguir con “determinada determinación” las opciones que debamos asumir a lo largo de la vida, enfocando desde el amor de Dios todos los caminos que nos invita a recorrer. Un corazón virginal es capaz de tomar opciones limpias y firmes a lo largo de la toda la vida, de ello la Virgen María es el ejemplo número uno.

Imploremos a Nuestra Madre del Cielo, la Santa Virgen de las vírgenes, que nos conceda imitar su entrega total a Dios a lo largo de este Mes bendito. ¡Que Viva Cristo Rey!







EL SANTO NOMBRE DE MARÍA

MES DE MARÍA/ MACKAY & STPETERS’S & PUERTO CLARO / 2017

Todos los que estamos en este lugar tenemos un nombre. Sería muy largo citar a cada uno de ellos, pero bien sabemos que responde al que nuestros padres quisieron colocarnos al momento de nacer, y –ciertamente- nos lo decían cuando aún estábamos en el vientre materno.

MADRE DE PUERTO CLARO
Dicho nombre responde a un acto voluntario y consciente de nuestros padres, que no es fruto de la suerte ni de algo circunstancial. Es consecuencia del nombre que ambos desearon darnos, y que –probablemente- es el que uno de ellos llevase en su vida, que evocara algo importante para la familia (bisabuelo, abuelo, tío, hermano, padrino), que recordase algún patrono espiritual (José, Ignacio, Matías, Alberto, Teresa) o alguna advocación religiosa (Rosario, Esperanza, Lourdes, Caridad, Trinidad). Lo cierto es que el nombre fue “intencionalmente” escogido, y desde entonces fue motivo de orgullo para ellos y para nosotros.

Dice la Santa Biblia que la Virgen tuvo un nombre: “la Madre de Jesús se llamaba María”. Así Dios lo solicitó directamente a sus padres – san Joaquín y Santa Ana- , y los cuatro evangelios cuando se refieren a Ella lo hacen recordando ese nombre: ¡María!

En tiempos de nuestro Señor, y especialmente en la cultura de Oriente, el nombre revestía no sólo el apelativo con que cada uno seria reconocido, sino que incluía –además- la misión que debería cumplir a lo largo de toda su vida.

Es decir, el nombre constituía un proyecto de vida, un itinerario que se recorrería, a lo largo de toda nuestra vida: desde la gestación hasta el último suspiro que Dios nos conceda.

a). El nombre de María como “amada de Dios”:
                   PASTORAL SAINT PETER’S SCHOOL 2017


En el caso de la Santísima Virgen el nombre de “María” significa la “amada de Dios”, por lo que cada vez que nosotros repetimos dicha expresión evocamos en su alma el saberse querida por Dios en todo momento

La Virgen María recibe distintos nombres, por dos razones: primero,  porque la grandeza de su vida y de su alma no puede encerrase en una sola denominación sino que se manifiesta de múltiples formas, y en segundo lugar, porque sus hijos son incontables, y en su corazón ninguno queda fuera.

Al interior de  nuestro hogar, cada hijo llama de forma diferente a su madre, y ella sabe percibir –perfectamente- lo que cada hijo requiere. Aún más, diremos que de manera instintiva, con el “sexto sentido” que el Señor le dio a toda mujer y madre, suelen percibir con el solo acto de escuchar el tono de voz de un hijo el estado de ánimo que trae: si le fue bien o mal, si anda preocupado o alegre, pudiendo por ello, con un particular  sentido de la delicadeza y diligencia saber cómo ayudar al hijo en todas y cada una de sus necesidades, de la mejor manera. En expresión del Papa Juan Pablo II: “es la mejor intérprete del amor de Dios para sus hijos”.

La Virgen cuyo Mes bendito hoy iniciamos, sabía que su nombre era una misión encomendada por el Señor. Por ello, desde el octavo día de nacida al ser presentada en el templo, recibe el encargo de ser “anuncio” y “presentadora”  (portadora) de Jesús, el Salvador del mundo.

En la Iglesia la manifestación del amor a la Santísima Virgen ha sido algo basilar, es decir, desde su inicio no ha dejado de mostrar su afecto y amor reverencial hacia la Madre de Dios, que en la persona de Jesucristo – perfecto Dios y hombre a la vez,  es nuestra Madre.

Nuestra Iglesia ha dedicado a lo largo del año un día especial para honrar el Santo Nombre de María, puesto que conmemora lo sucedido en Austria en septiembre de 1683. Entonces, los católicos defendieron la ciudad de Viena enfrentándose  al doble de sus adversarios. Con la ayuda de Dios pudieron salir victoriosos por medio de una batalla breve pero violentísima, en la cual, en el transcurso de pocas horas murieron unos veinte mil musulmanes.

Sin duda, la historia enseña que hubo un antes y un después en todo el mundo cristiano luego de aquel día donde gran parte de Europa  enfrentaba el avance del islam que –por entonces- se presentaba como imparable. Por intervención de la Virgen hubo un freno definitivo.

El general polaco (Juan Sobiesky)  que obtuvo la victoria envió una carta al Santo Padre citando la antigua frase del emperador Julio César: “Vine, vi y vencí”, la sustituyó, en su condición de creyente que era por: “Vinimos, vimos y Dios venció”. El mérito era del Señor…pero también era atribuible al poder de intercesión de aquella Virgen cuyo nombre es María.

 MES DE MARIA AÑO 2017 KINDER

b). El nombre de María como “linaje de Dios”:

También, el nombre de la Virgen proviene de la expresión hebrea: “Dios es de mi linaje”, reconociendo con ello que el ADN de la Virgen anuncia que fue creada “muy parecida a Dios” pues solo Ella tuvo el privilegio del Cielo de ser denominada: “la llena de gracia” en la voz del arcángel San Gabriel.

La unión entre la persona del Hijo y de su madre nos hace descubrir que Jesús nunca niega lo que se pide a nombre de su Madre. Por aquella obediencia nacida del amor perfecto, el Señor no deja de hacer todo lo que la Virgen le pide, dando un valor muy grande a todas nuestras peticiones que hacemos bajo el dulce y santo Nombre de María.

c). El Nombre de María como “señora” o “soberana”.

Para los Padres de la Iglesia este nombre significa “señora” o “soberana”. Consideremos, al inicio de este Mes bendito que si el Señor Jesús tiene compasión de un deudor arrepentido ¿cuánto más tendrá misericordia por aquellos que invocamos aquí en la tierra el solo nombre de María?

Como el Señor dijo que “todo lo que  pidamos en su nombre nos será concedido”, el solo hecho de recordar el nombre de su Madre, de manera cotidiana a lo largo de un mes completo, hace resonar como un eco lo dicho aquí –en el tiempo que pasa- que se oye allá en el Cielo –en la eternidad-. Por esto el nombre de María es una llave que abre la puerta del cielo para recibir muchas bendiciones y para obtener perdón por las almas de los difuntos que se purifican en el purgatorio.

Recordemos que el nombre de la Virgen significa: Amada de Dios, el Linaje de Dios y la Señora del Cielo. Que Ella nos bendiga con la fidelidad a lo largo de todo este Mes consagrado a su Dulce Nombre. ¡Que Viva Cristo Rey!



    

martes, 7 de noviembre de 2017

LA EUCARISTÍA FUENTE Y PLENITUD EN LA VIDA DE LOS SANTOS”.

 HOMILÍA PRIMERA COMUNIÓN SAINT PETER’S SCHOOL  / AÑO 2017.

                          COLEGIO  CATÓLICO  SAINT PETER’S 

1.     Búsqueda de la santidad.

Una vez al año,  los héroes de la Patria reciben nuestro reconocimiento cuando los colegios de nuestra ciudad vamos a la Avenida Perú a desfilar frente a la imagen de Arturo Prat y cada veinte de agosto frente a la imagen de Bernardo O’Higgins. Ambos son importantes para nuestra Patria, porque hicieron mucho por ella. Los denominados “héroes” de una Nación son ejemplo inspirador para los habitantes de la Patria, y siempre es bueno destacar sus virtudes.

Hace un par de días celebramos la fiesta de todos los Santos.  La Iglesia tiene sus héroes de la fe porque han hecho todo por amor a Dios, llegando a tener un grado de perfección digno de ser imitado por todos los creyentes.  A lo largo de su vida, aprendieron a postergar sus gustos y a focalizar sus proyectos personales en la búsqueda de un bien superior y trascendente.


Sin duda, descubrieron que el don de la fe recibido en el sacramento del bautismo  a temprana edad, debía aumentar con el paso de los años. Por esto, hoy, ustedes niños,  harán la renovación de las promesas bautismales en primera persona, esto es, diciendo “yo prometo” y “yo creo” las cuales el día del bautizo repitieron sus padrinos por ustedes. Lo hacen no porque han cumplido más años de vida sino porque la fe es hoy más consiente y activa.

Esto nos indica que la fe debe crecer,  debe madurar, lo cual se hace “creyendo”. Entonces, la fe aumenta en la justa medida que vamos abandonando todo nuestro ser en la voluntad de Dios, lo que trae como inmediata consecuencia que se contagie virtuosamente nuestra fe hacia los demás, por lo que en la medida que estamos convencidos respecto de lo que Dios es, seremos convincentes para anunciar quien es Dios para todo el mundo. Convencidos para convencer; evangelizados para evangelizar.

                         COLEGIO BRITÁNICO SAINT PETER’S


Así,  la fe se fortalece dándola a los demás porque nosotros en la medida que creemos, que colocamos todos nuestros proyectos y los logros en las manos de Dios, los ofrecemos como un regalo que el Señor nos ha permito obtener. La gratitud nutre la confianza y la confianza abre la perspectiva  hacia un gozo esperanzado.

Lo anterior nos lleva reconocer que en la semilla de las grandes transformaciones del mundo, siempre los hombres de fe  han ocupado un lugar preponderante, tal como nos enseña la historia bíblica de patriarcas, profetas y reyes del Antiguo Testamento, como de los primeros discípulos del Señor. Más allá de sus talentos y miserias; de sus conocimientos e ignorancias; de sus virtudes y defectos, prevaleció en todo momento la fe en Jesús. Esa fue la primera y última palabra en todas sus acciones…una expresión hecha súplica ante el mismo Cristo cuando le dijeron: “Señor, auméntanos la fe”.

2.     El momento de la conversión.

Los Santos escucharon la invitación de Jesús un momento en su vida. Fue un antes y un después, donde percibieron que ya no eran los mismos, lo cual nos ayuda a comprender que en el caso de nuestros “héroes de la fe”, ellos no nacieron santos, sino que,  dóciles y obedientes a la gracia,  en el tiempo alcanzaron la cumbre de la perfección cristiana. Así, vivieron pensando que un día más de vida concedido constituía un día menos lejos de estar con Dios para siempre.


Queridos niños: Tratándose de algo esencial para nuestra vida como es la vivencia de la fe en Cristo no les puedo ni deseo –por formación- hablar “con monitos animados”, porque sé que cada uno de ustedes es capaz de  vislumbrar la santidad como  el mejor proyecto, la más noble tarea, y la misión más desafiante que tenemos porque jalona cada instante y cada etapa de nuestra vida. Nada queda al margen de esta misión, todo adquiere importancia en tanto cuanto nos acerca o aleja del Buen Dios.

¡Cielo perdido, todo perdido, Cielo ganado, todo ganado! ¡Omnia vincit!
Por lo anterior, no puedo dejar de recordarles que la santidad es un camino “cuesta arriba”. Por ello,  no es una senda fácil, se requiee de un esmerado esfuerzo y constancia, las cuales son virtudes tan alejadas de lo que la cultura y sociedad actual les ofrece a ustedes donde se les presenta un mundo en el cual todo parece mágicamente fácil, en el cual la cosas y bienes se obtienen sin involucrarse.

Hay demasiados caminos que no conducen al Dios, único y verdadero. Y,  con frecuencia se les enseña por los medios de comunicación y redes sociales,  que a los logros sólo se llega a causa  del poder y de lo fortuito.

Por lo anterior, todo aquello que requiere tiempo, dedicación, esfuerzo, y compromiso, o se posterga o se desecha. Los ofertones de felicidad son simples fantasías que tempranamente dejan ver la naturaleza de su origen que se transforma en tristeza, división, e individualismo. Tal como lo experimentaron Adán y Eva en el paraíso terrenal luego de desobedecer a Dios en sólo uno  de sus preceptos.


                       MISA DE COLEGIO SAINT PETER’S CHILE


Las exigencias de Dios son el camino por el que pasa nuestra realización. Ser feliz va de la mano con el acto de cumplir la voluntad de Dios. La Virgen María fue reconocida como la que cumplió en todo  la voluntad del señor en todo, desde su más tierna infancia. Su grandeza estuvo fundada en la fidelidad del Dios que se reveló como siempre fiel. 

Por esto, los santos navegan a contracorriente: Los salmones en los ríos y los surfistas en el mar tienen algo en común…¿Qué será? Que logran su objetivo nadando contra la corriente, para lo cual deben vencer enormes obstáculos y no dejarse llevar por la fuerza del oleaje ni el caudal. En ambos casos terminarían en la orilla de una playa en calidad de desecho.

Por ello dice la primera lectura: “que no seamos ya niños, llevados a la deriva y zarandeados por cualquier viento de doctrina, a merced de la malicia humana y de la astucia que conduce engañosamente al error” (Efesios IV, 11).

Para obtener las cosas que importan es necesario hacer grandes esfuerzos, que exigen múltiples pequeños e imprescindibles inicios. Una gran pared se edifica ladrillo a ladrillo, de modo semejante una vida santa se realiza en cada jornada, descubriendo que todo momento es una oportunidad de ser santos. No hay por tanto un “tiempo” especial, un “estado” especial, un “lugar” especial para ser perfectos, sino que Dios nos invita a buscar la santidad en todo ámbito, en cada día y a lo largo de todo el día.

Recordemos la primera lectura de este día: “No os acomodéis al mundo presente, antes bien transformaos mediante la renovación de vuestra mente, de manera que podáis distinguir cuál es la voluntad de Dios: lo bueno, lo agradable y lo perfecto(Romanos XII, 1-2).
DIÓCESIS DE VALPARAÍSO CHILE

 El ámbito de santidad para quien quiera cumplir a voluntad de Dios se desenvuelve en medio del mundo en que estamos inmersos, pero “sin dejarse seducir con el mundanismo”. Estar en el mundo sin ser del mundo significa que debemos hacer el esfuerzo porque todos y en todo, procuremos hacer que la persona de Cristo sea más buscada, mas encontrada y mas amada.

3.     Jesús camina con nosotros en la Santa Misa.
Es posible que el desafío de la fidelidad y el seguimiento del camino a ser santos nos hagan tener cierto temor por la grandeza de los desafíos. Esto queda definitivamente superado cuando recordamos que fue el mismo Cristo el que quiso quedarse de manera “real y substancial” en nuestros templos, altares y sagrarios. ¡Aquí está Dios! ¡Aquí vive Jesucristo!  Por lo tanto, este es el hogar de nuestra alma se encuentra cara a cara con el Señor.

El relato de la resurrección nos habla de la nostalgia de dos jóvenes que regresan a su casa luego de la pasión y muerte de Jesús, creyendo que nada podía cambiar…de pronto Jesús se puso a caminar con ellos, y sólo le reconocieron al momento de la Fracción del Pan, es decir, en la misma presencia del Jesús.

 Jesús nos acompaña en este camino. Ha querido quedarse en medio nuestro en su Cuerpo, Sangre y alma en la Santísima Eucaristía, entonces, Cuando participamos en la Santa Misa el tiempo se detiene porque la eternidad ha llegado.

                      SACERDOTE JAIME HERRERA CHILE
      


Por esta razón este es el día más importante en vuestra vida. El día de su Primera Comunión Santa Teresa de los Andes escribió en su Diario de Vida que recibió “un trozo del cielo”. Desde entonces,  ¡Su vida cambio totalmente! Al extremo que su devoción eucarística ha sido capaz de transformar una pequeña localidad en la capital religiosa de Chile y su testimonio de amor a Dios y a la Iglesia ha vencido a las altas montañas y los abismos de nuestro mar hasta llegar a los más recónditos lugares.

MISA PRIMERA COMUNIÓN 2017

De modo similar, la Virgen María es la mujer más honrada en el mundo, porque su mayor grandeza fue haber sido fiel en todo a nuestro Dios, repitiendo en esta hermosa mañana, la invitación hecha a los jóvenes de Caná de Galilea: ¡Hagan todo lo que Jesús les diga! ¡Que Viva Cristo Rey!.

SAINT PETER’S SCHOOL VIÑA 2017



   COLEGIO  CATÓLICO  SAINT PETER’S